martes, 28 de agosto de 2012

La Misericordia De Dios



NO OLVIDEMOS NUNCA SOLO DIOS PUEDE RESCATARTE

* El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias. Salmos 103:4

• Este verso esta refiriéndose en su primera parte al rescate de la vida, el hoyo significa la muerte. Y luego la segunda parte de las grandes misericordias de Dios sobre nuestra vida.

• El alma fue rescatada de la muerte por la sangre de Jesús, nótese este aspecto porque no tiene nada que ver con lo terrenal. Rescatar del hoyo significa que el alma está siendo redimida para la vida eterna. Él rescata tu vida del sepulcro y te cubre de amor y compasión;Corona de Favores y Misericordias
• Es hermosa esta parte del texto, quien podrá coronarnos de favores y misericordias solo Dios. Pero esto no lo hace con cualquiera sin con aquellos que los escogió como hijos.
• Cuando hablamos de “Corona “su traducción en griego es “Cerco “. El coloco un cerco alrededor de nosotros, su cerco fue la bendita sangre que derramo en la cruz del calvario.
• El alma debe educarse y enseñarle que no existe nadie que pueda salvarnos de la muerte solo Jesucristo y además nos corono de favores y misericordias.

NO TE DEJARA EN EL HOYO
Dios es fiel y nunca nos dejara permanentemente en el foso de la angustia, lo que tenemos que hacer es clamar, suplicar y actuar para que seamos rescatados así como el apóstol Pedro cuando se empezó a hundir en el mar, el clamo a Jesús y él extendió su mano para rescatarlo de la muerte.


La misericordia del Señor es un tema muy hablado en la Palabra de Dios. La palabra “misericordia” aparece ahí más de 250 veces y hoy le daremos un vistazo a algunas de esas apariciones. 
“Mas Dios muestra Su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” Romanos 5:8

Estábamos muertos. Él estaba lleno de amor, misericordia y compasión. Extendió Su mano y nos vivificó. A pesar de ser indignos nos hizo dignos. Aunque éramos pecadores, nos hizo justos. Aunque éramos sus enemigos nos reconcilió con Él. Aunque estábamos en el reino de oscuridad, nos trasladó al reino de Su amado Hijo. Ciertamente, qué grande es su gracia, amor, y misericordia para cada uno de nosotros en lo personal.

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