Tal vez no seas como otros, quizá haya en ti
muchas cosas que no te gusten, pueda que no tengas aquel talento que te gustaría
tener, sin embargo TIENES EL AMOR DE DIOS, eres
AMADO(A) por Dios.
No puedes pasarte la vida menospreciándote,
creyendo que no tienes un propósito, pensando que nunca avanzaras o que todo lo
que hagas siempre saldrá mal, esa no es la mentalidad de un hijo de Dios, esa no
es la mentalidad de un príncipe o una princesa que tiene como Padre al Rey de
reyes.
Quizá durante tu vida has escuchado
recurrentemente palabras negativas hacia tu persona, quizá has llegado a pensar
que a lo mejor tienen razón en lo que dicen de ti, que no llegaras lejos, que
nunca te irá bien, que no serás feliz, pero eso es
¡MENTIRA!
Cuando Dios te llamo no vio en ti a un perdedor,
Él vio en ti la capacidad que tienes para ser útil en Él, tú naciste con un
propósito, el propósito perfecto de Dios que ha de cumplirse en tu vida, pero
que no se cumplirá mientras sigas menospreciándote a ti mismo, mientras sigas
creyendo que es imposible que alcances otras metas o que cumplas tus sueños.
Es hora de comenzar a creer no en lo bueno que
soy o en las cualidades que tengo, sino en lo que Dios puede y quiere hacer en
mi vida, pues Él puede hacer cosas que ni imaginamos, cosas que nos
sorprenderán, cosas que no creíamos que fuéramos capaces de hacer, pero que Él y
solo Él nos da la capacidad para hacerlo.
Tú eres un príncipe, tú
eres una princesa de Dios, toma posesión de tu lugar, de tu estatus, no te creas
poca cosa, lo que los demás digan no es lo que Dios piensa de ti.
Cuando escuches a personas hablar cosas que no
son de ti, cuando te quieran menospreciar, cuando a las personas que les
comentes tus sueños no crean en ti y hasta se burlen,
¡Tranquilízate! Lo que ellos digan, piensen o como actúen, no
determinara realmente lo que Dios hará en ti.
Tienen que comenzar a pensar como príncipe o como
princesa, no puedes pasarte la vida pensando como esclavo o mendigo, tú has sido
llamado y llamada para grandes cosas, para conquistar, para avanzar, para no
detenerte si no es para respirar y seguir avanzando, tú tienes en tu vida la
presencia de Dios y ello te ha hecho más que vencedor, por lo que ahora eres un
victorioso, por lo tanto comienza a vivir como tal.
Que nadie arruine tus sueños, que los comentarios
de las personas no te hagan detener, al contrario que cada comentario negativo
hacia tu persona sea una frase más que te motive a luchar por alcanzar lo que
tanto has soñado, lo que digan, piensen o hagan en contra de ti, no determinara
lo que DIOS SÍ HARÁ EN TÚ VIDA.
¡Avanza sin temor!
"Jehová cumplirá su propósito en mí;Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre;No desampares la obra de tus manos."
(Salmos 138:8)
Autor: Enrique Monterroza
Escrito originalmente para www.destellodesugloria.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario